Mucho se está hablando del cambio de paradigma en la educación por las nuevas competencias necesarias a día de hoy, la urgencia de nuevos contenidos o simplemente porque la educación no puede quedarse atrás.
Pero imaginemos por un momento que asumimos la dirección de un centro que quiere innovar, y hay que responder a todas estas necesidades de las que hablamos y además no morir en el intento… ¿Por dónde tendríamos que empezar?
Cada institución es un ecosistema en sí mismo con distintas velocidades, idearios y contextos y, por tanto, lo primero que debemos conocer es el punto de partida.
¿Consideramos que nuestro estilo didáctico es diferencial?, ¿utilizamos diferentes metodologías con y sin tecnología?, ¿pensamos cómo estamos construyendo nuestro “edificio digital”?, ¿tenemos estrategias sobre cómo afrontar los temas relacionados con la seguridad digital?